Mujeres en la Historia. María Lejarraga

Os voy  a hablar de una  mujer  fascinante, ignoramos casi todo sobre ella. Hablo de María Lizárraga  esposa  de Gregorio Martínez  Sierra, uno de los dramaturgos españoles más famosos de principios de siglo: Canción de cuna la obra que llevo al cine, es de él. O mejor dicho está firmada por él. Porque en realidad la escribió María, o como todas las demás obras del marido: es un hecho comprobado ( las  investigaciones de  Patricia O’Connor ,  Alda blanco y Antonina Rodrigo son irrefutables) que Gregorio colaboró muy poco o tal vez nada. De  modo que ella fue la autora de numeroso  éxitos  teatrales.  María nació en 1874, en San Millan de la Cogolla ( La rioja) pero se crio en el pueblo de Carabanchel, en este entorno,

vivió y creó María. A los 23 años se  echó su primer novio y último, se cararon tres años después en 1900, mientras Gregorio zanganeaba en la cama hasta muy tarde. Aunque hay que decir, para ser justos, que no permanecía todo el día inactivo era capaz de autopromocionarse  de un modo formidable, como gestor, fue una figura fundamental del  Modernismo Español. Gregorio se lió en 1906 con la hermosa Catalina Bárcena, famosa actriz joven, en silencio soportaba las zafias y mezquinas crueldades de la actriz. En esa situación imposible vivo María durante años, hasta que en 1922 Catalina tuvo una hija con Gregorio. Entonces María se separo, entre avatares idas y venidas a países, calamidades, para no extenderme mucho porque la biografía es extensísima. Fue  durante la República cuando María recupero el habla, empezó a dar conferencias feministas en su propio nombre, se hizo  socialista, y se presento a las elecciones de 1933. En su hermoso libro autobiográfico,  Una mujer por los caminos de España. Por esos pueblo  miserables marchaba María con su voz recién rescatada, más tarde anciana  y viuda contaba María ´veome en la necesidad de proclamar mi maternidad para poder cobrar mis derechos, enfurecidos caballeros de todo el mundo arremetieron contra  las ( pretenciones literarias de María. Quien sabe, tal vez esa ira llena de prejucios nuevamente contribuyera una vez más a callar  a María a que se cerrara nuevamente  sobre ella las aguas del olvido y del atroz  silencio femenino. La biografia es muy contundente leerla  si   podeis  no tiene desperdicio